miércoles, 25 de mayo de 2016

Examen Mexicana 8 (siglos XX y XXI), 31 de junio 2016



Algunos conceptos de crítica literaria vistos a lo largo de curso. 



·                     Autor Implícito/real
·                     Datos referenciales
·                     Desautomatización
·                     Despersonalización
·                     deconstrucción
·                     Espacios vacíos
·                     Experiencia estética


·                     Hibridación
·                     Horizonte de expectativas
·                     Intertextualidad
·                     Isotopía
·                     lector Implícito/real
·                     Lugares de indeterminación
·                     Prolépsis y analepsis
·                     Repetición e iconicidad
·                     Tópico


Conceptos de Pragmática de la Comunicación Literaria

Conectivos y marcadores discursivos
Control de daños
Control de riesgos
Deixis
Enunciado y enunciación
Estados alterados de la conciencia
Genología (architextualidad)
Hermenéutica
Implicaturas, presupuestos, sobreentendidos
Ironía
Locución, ilocución y perlocución
Macroniveles
Onomástica
Pactos genéricos
Paratextualidad
Principios pragmáticos (autoridad, cooperación, pertinencia, relevancia, reticencia, sinceridad)
Refutación lógica y refutación pragmática
Semiótica pragmática
Situación comunicativa (sc)
 

Temas:

“Arte poética”
Editor y editoriales
La ciudad como personaje
Literatura de la onda
Poética
Poéticas de la brevedad


Géneros

Cuento
Novela
Poesía

Subgéneros

Cuento fantástico
Novela corta o Nouvelle
Poesía concreta
Nueva novela histórica
Novela policiaca
Minificción

Poemínimos


jueves, 19 de mayo de 2016

4° reporte de lectura, 24 / mayo / 2016

4° reporte de lectura






 

 Elegir algún texto de una de las siguientes obras vistas en clase y realizar un breve comentario crítico (2 cuartillas), preferentemente NEGATIVO, utilizando alguno de los conceptos del Manual de Pragmática de la comunicación literaria de los capítulos del 8 al 13.

1.         Sergio Pitol: “Relato veneciano de Billie Upward”
2.       Paco Ignacio Taibo II. La vida misma.
3.        La literatura de la onda: Parménides García Saldaña. Pasto verde o José Agustín La contracultura en México
4.        Fernando del Paso Noticias del imperio
5.        Jorge Ibargüengoitia: Los relámpagos de agosto.
6.        Ulises Carrión y el libro objeto: poesía, artes plásticas y artes visuales.


El trabajo se entregará impreso el día 24 de mayo de 2016, a las 10:00 horas en el salón de clase, y deberá de contar con las siguientes características:

o   Tipografía Arial o Times, 12 pts., interlineado 1.5, justificado.
o   Se calificará sobre 100 puntos, tomando en cuenta entrega en fecha y hora.
o   Deberá contener introducción, desarrollo y conclusión.
Se tomarán en cuenta, además:
·  Argumentación (juicios críticos apoyados con bibliografía).
·  Puntuación.
·  Ortografía y erratas.
·  Citas textuales (cualquier plagio detectado ocasionará una calificación reprobatoria  de 0.0 pts).


lunes, 9 de mayo de 2016

La contracultura de los años sesenta como influencia en la literatura de la onda en la figura de Parménides García Saldaña, Josaphat Guillén





INTRODUCCIÓN

La concepción que se tenía de juventud, a mediados del siglo XX, era de una etapa difícil de la vida, era considerada como una enfermedad que se curaba con el paso del tiempo.

  Precisamente por esto, los gobiernos, conscientes de la maleabilidad característica de los jóvenes, los usaban como conejillos de indias, es decir, se aprovechaban de su ingenuidad y los dirigían hacia sus causas. En la mayoría de los casos eran usados como carne de cañón, basta recordar a las juventudes hitlerianas y a los hijos de la loba, que fueron producto de la enajenación de un sistema político que les ofrecía todo lo que un joven busca: identidad, sentido de pertenencia y poder.

            No obstante, después de la Segunda Guerra Mundial, la juventud empezaba a manifestarse de diferentes formas y gradualmente fue buscando una identidad propia, lejos de la tutela de los adultos, pues las noticias de los trágicos fines de los grupos políticos juveniles provocaron un desencanto con la política y con las personas que la practicaban: los adultos.


     Con el fin de la guerra, Estados Unidos se erigió como el país que le regresó la paz al mundo, además se perfiló como la nación que dictaría las pautas a seguir en cuestión de negocios y productos, pues era evidente que, siendo el país menos afectado por el conflicto bélico, dirigiría tanto los mercados como los productos que en ellos se ofertarían. Pero, ¿qué productos se le podía ofrecer a un mundo que empezaba a reconstruirse, después de una larga y cansada guerra de más de cinco años? Aun más, a qué estrato social irían dirigidos los nuevos productos, si la época de la posguerra mostró a un mundo sin adultos económicamente activos, pues la generación que estaría en condiciones de trabajar era la que había ido a la guerra, esto provocó que los jóvenes se vieran en la necesidad de  trabajar, convirtiéndose así en una edad económicamente activa; por esto el sistema
estadunidense crearía y dirigiría sus nuevos productos a ellos.
      Los jóvenes fueron los receptores de las grandes campañas de publicidad, pronto el mercado se vio abarrotado de productos superfluos, que en un corto plazo generó necesidades inútiles y banales dando origen al consumismo, el pilar que no sólo sostuvo a la economía de aquel país, sino que también la hizo próspera. Este consumismo se basó en la invención de necesidades y pronto todo se volvió comprar, tener y acumular bienes y productos sin que éstos realmente tuvieran un fin práctico. La sociedad y, sobre todo, los jóvenes habían sido enajenados de nueva cuenta.
  Pero, a pesar de ello, a principios de los cincuenta, en Estados Unidos empiezan a surgir una serie de manifestaciones culturales juveniles que cuestionaron este vicio burgués del tener sobre el ser. La primera de estas manifestaciones fue la de los escritores betas que, a través de sus libros, cuestionaron todos los preceptos de su sociedad, desde el viejo american dream hasta el consumismo.

  Escritores como Ginsberg y Kerouac describieron una vida alterna al american way of life, donde se desechaban los cánones de la sociedad americana tradicional para vivir en los contravalores de ésta. Estas descripciones eran las experiencias que obtuvieron cuando desecharon el modo de vida americano y decidieron visitar los barrios negros donde se impregnaron del modo de vida e ideología de esta raza. Por supuesto que le dedicaron gran parte de su tiempo a la experimentación sicodélica por medio de la marihuana y de la benzedrina. Gracias a este roce, se dieron cuenta de la realidad del sueño americano, pues mientras unos vivían en grandes residencias y visitaban el country club los fines de semana, había otras personas que no encajaban o eran segregadas por el sistema americano, y que su única distracción era bailar al son del rithym & blues y drogarse para poder escapar o liberarse, por unos momentos, de la realidad que los agobiaba.
    A pesar de que el movimiento beat, en un principio, no se mostró como una vanguardia literaria, sus precursores comenzaron a escribir sus experiencias en los barrios negros de New York y San Francisco. De esta forma, surgen libros como el polémico Aullido (1956) de Allen Ginsberg, y En el camino (1957) de Jack Kerouac, que marcó la apoteosis del movimiento beat. Así fue que se mostraron como los jefes de propaganda de la vida contracultural de Estados Unidos, pues a través de sus libros mostraron lo viable de una forma de vida alterna u opuesta a la establecida. Después de la generación beat, muchas manifestaciones juveniles se suscitaron, todas influenciadas directa o indirectamente por los ellos. La primera de ellas: los hippies.
     Con el surgimiento de los hippies, la juventud obtuvo mayor autonomía y provocó una brecha generacional (la crisis entre las relaciones joven-adulto) que hasta el momento habían sido sobrellevadas y en pocos casos conflictivas. Dichas relaciones se vieron fragmentadas a partir de los cambios que sufrió la juventud hippie. Por una parte, siguieron el ejemplo de los beats y decidieron alejarse del enajenante consumismo yanqui, se fueron a vivir a comunas donde desecharon las normas sociales y vivieron libres, alejados del
establishment , ellos mismos fundaron su sociedad y pusieron las reglas. Por otra parte, con la experimentación sicodélica con diferentes tipos de droga, ya no sólo con marihuana o benzedrina, la nueva juventud tuvo la oportunidad de ver las cosas como realmente eran, mediante el ácido lisérgico, mejor conocido como LSD. Esto gracias a las investigaciones de Timothy Leary y Ken Kesey.


   Pero lo que terminó de escandalizar a los adultos y detonar la bomba generacional fue la práctica libre y sin compromiso del sexo. La liberación sexual de los sesenta fue […].


Josaphat Guillén

Texto completo en el siguiente link:

https://www.academia.edu/20096310/La_contracultura_de_los_años_sesenta_como_influencia_en_la_literatura_de_la_onda_en_la_figura_de_Parménides_Garc%C3%ADa_Saldaña



Estrategias de locución e ilocución para la creación del ritmo poético en “Piedra de Sol”, Nadia Zulem Olguín Carrillo



Estrategias de locución e ilocución para la creación del ritmo 
poético en “Piedra de Sol”

El 28 de septiembre de 1957, el Fondo de Cultura Económica publicó “Piedra de Sol”  de Octavio Paz en la colección Tezontle. Esta obra fue muy atractiva debido a que el autor logró trasladar su percepción del mundo al discurso poético valiéndose tanto de eclécticos contenidos temáticos como de una estructura textual muy peculiar. Así, la arquitectura exterior del poema (la cual se percibe como circular ya que los primeros seis versos son idénticos a los últimos) y la cadencia dada por la multiplicidad de ritmos que nos conceden sus versos, son análogas al interior temático de la obra: la creación del universo, el movimiento de traslación de Venus, el ciclo cósmico, la continuidad, la libertad moral del hombre. Aunque en el presente estudio no podré profundizar en las conexiones directas que existen entre la forma del poema y los ejes temáticos del mismo, sí trataré de resaltar algunos de los elementos de la organización intencional del texto que dotan a éste de un ritmo muy peculiar y que, al mismo tiempo, dan cuenta de las estrategias locutivas e ilocutivas en el macronivel autor-lector.
El sentido y el ritmo de “Piedra de Sol” se muestran desde su íncipit. El poema posee un epígrafe compuesto por un fragmento de “Arthémis” de Gérard de Nerval, paratexto que nos sirve como punto de partida para desentrañar y entretejer los sentidos a los que nos enfrentaremos a lo largo de nuestra lectura, pues funciona como uno de los “guiños que activan y dirigen la lectura”.[1]  Una vez que comenzamos a leer los versos del poema de Paz, observamos que está escrito en endecasílabos que carecen de rima y cuyos acentos principales varían.  Así, el verso blanco ofrece libertad tanto al autor como al lector, pues el resultado será un poema polirrítmico basado en juegos de quietud y de movimiento: “árbol bien plantado mas danzante”;[2] y aún de fragmentación: “avanza, retrocede, de un rodea”.[3] Así pues, es destacable que el poema inicia con letra minúscula, lo que nos indica que el íncipit no es sino la continuación de un “itinerario circular”[4] que no tiene final, pues el sexto endecasílabo, el cual es a su vez el verso número 590, queda quebrantado, y los dos puntos denotan una continuación de la frase poética, un “recomienzo infinito del poema”.[5] Por lo anterior, pienso que los primeros seis versos de este poema nos dan indicios sobre cómo será el  fluir verbal de todo el texto. 
       
A través de esta revisión del inicio de “Piedra de Sol” podemos advertir tanto algunas de las estrategias locutivas del texto, es decir, las “estrategias retóricas y poéticas”,[6] como algunas de las estrategias ilocutivas, las cuales, en relación con las locutivas, “nos ayuda[n] a comprender el TL como un entramado perfectamente intencional”.[7] Así, el ritmo creado a través de la disposición de las palabras, de los acentos, de las pausas, al igual que cuando tocamos un tambor, “revela una cierta intencionalidad […] El ritmo provoca una expectación”[8] sobre el lector.
Al continuar con la lectura de “Piedra de Sol”, nos podemos percatar de que los conjuntos de versos, a los cuales Hugo Verani denomina secuencias irregulares y no estrofas,[9] están separados por espacios en blanco. En el poema no existe ningún punto. El signo de puntuación más frecuente es la coma, seguida por los dos puntos (20 en total), punto y coma (11) y tres puntos (4). Así, vemos que este poema está estructurado en su mayoría con oraciones yuxtapuestas, “cada una de las cuales actúa como puente, como etapa, confundiéndose casi, en el nivel imaginístico, con la que le precede y con la que le sigue”.[10] Así, encontramos una mínima cantidad de marcadores discursivos y de conectivos hipotácticos  pues, al existir poca subordinación, predominan los conectivos paratácticos[11] que organizan la información de una forma horizontal, creando tanto enlaces sintácticos como ligaduras rítmicas.
Por todo lo anterior, pienso que los recursos retóricos y los elementos estructurales tales como la métrica, la rima, la puntuación, el incipit, el final, el paratexto, los espacios en blanco, y la disposición de las palabras en “Piedra de Sol” son actos intencionados del autor que funcionan como estrategias de locución e ilocución y que además dotan a todo el poema de un ritmo que es, a su vez, una incitación análoga al contenido del poema.

Nadia Zulem Olguín Carrillo


Bibliografía:

GIMFERRER, Pere, Lecturas de Octavio Paz. Barcelona: Anagrama, 1980.

GUERRERO, Maricela, “Piedra de Sol, 1957”, en Letras libres,  [En línea] <http://www.letraslibres.com/blogs/polifonia/piedra-de-sol-1957> (Página consultada el 12-marzo-2016).

PAZ, Octavio, Libertad bajo palabra. México: Fondo de Cultura Económica, 1995.

_________.  El arco y la lira. México: Fondo de Cultura Económica, 1972.

VERANI, Hugo J., Octavio Paz: el poema como caminata. México: Fondo de Cultura Económica,  2013.

VITAL, Alberto, Alexandra Saavedra Galindo et al (comp.  ed.), Manual de pragmática de la comunicación literaria. México: Universidad Nacional Autónoma de México, 2014.

Imágenes:
"Octavio paz Circularidad" en:

Imagen "Poesía y ritmo" en:



























[1] César Cañedo, “Implicaturas, presupuestos y sobreentendidos” en  Manual de pragmática de la comunicación literaria. México: UNAM, 2014, p. 148.
[2] Octavio Paz, “Piedra de Sol” en Libertad bajo palabra. México: FCE,  1995, p. 245.
[3] Idem.
[4] Pere Gimferrer, Lecturas de Octavio Paz. Barcelona: Anagrama, 1980, p. 34.
[5] Hugo J. Verani, Octavio Paz: el poema como caminata. México: FCE,  2013, p. 89.
[6] Manual de pragmática de la comunicación literaria, p. 294.
[7] Ibid., p. 293.
[8] Octavio Paz, El arco y la lira. México: FCE, 1972, p. 57.
[9] Idem.
[10] Pere Gimferrer, op. cit., p. 28.
[11] Véase Adriana Haro, “Conectivos y otras palabras de enlace” en Manual de pragmática de la comunicación literaria, pp. 167-178.